Reseña: Diecinueve minutos

Feliz primer día de verano ;) Hoy escribo sobre un libro poco conocido (realmente me suelo leer libros poco conocidos) que trata sobre unos temas un poco fuertes. Diecinueve minutos de Jodi Picoult.




Nombre: Diecinueve minutos
Autor/a: Jodi Picoult
Editorial: Planeta
Nº de páginas: 668

Sinopsis:
Peter Houghton desde pequeño a sido abusado física y verbal mente en el colegio, su antigua mejor y única amiga ahora esta en el grupo de los populares que le hacen la vida imposible a Peter, él se refugia en los ordenadores, creando juegos, inventando una realidad alternativa a la que vive, crea un juego en el que el gane, en el que los perdedores ganan a los matones, en este alguien como el, poco popular, entra en el colegio armado y tiene que matar a los matones. Pero todo cambia cuando Peter estalla y hace que su juego se haga realidad, entrando armado al colegio, matando a 10 personas, dejando a varios heridos, y a muchos mas con las vidas dadas completamente la vuelta.

Opinión personal:
Aunque este libro habla de varios temas bastante duros, a mi me a gustado, la verdad es que se lo recomendaría a todos, lo que me sorprendió de este libro es de todos los puntos de vista desde donde cuentan la historia, el libro empieza contándote el día en que sucede el asalto, y el después al principio no sabes nada de lo que a pasado dentro del colegio, todo el antes y el después te lo van contando distintas personas, desde Peter, Josie ( su antigua amiga), los padres de Peter, abogados, policías, etc. A mi al final me a gustado mucho, y te da bastante de que pensar, en lo que puede llegar a afectar a alguien cosas que a lo mejor desde nuestros ojos no parecen para tanto, te das cuenta como un solo acto puede llegar a cambiar todo. Yo os lo recomiendo totalmente.

Principio del libro 1: (pongo 1 ya que entre algunos capítulos vienen como con pensamientos que ha tenido Peter, y que te ayudan bastante a entender como se siente y lo que voy a poner ahora es lo que sale en la primera página pero que en realidad es un pensamiento suyo no el comienzo de la historia)

Espero estar muerto para cuando leas esto.
No se puede deshacer lo que ya ha sucedido; no se puede retirar una palabra que ya ha sido pronunciada. Pensarás en mí y desearás haber sido capaz de hablar conmigo de esto con calma. Tratarás de imaginar qué podrías haber dicho, que podrías haber hecho. Supongo que yo te habría tranquilizado: "No te eches la culpa, tú no eres responsable", pero sería mentira. Los dos sabemos que yo nunca habría llegado a esto por mí mismo.
En mi funeral llorarás. Dirás que esto no tendría que haber pasado. Actuarás como todo el mundo espera que actúes. Pero ¿me echarás de menos?
Y, lo que es más importante, ¿te echaré yo de menos a ti?
¿Alguno de los dos quiere de verdad escuchar la respuesta a esta pregunta?

Principio del libro 2: (este es el principio del primer capítulo)

Diecinueve minutos es el tiempo que tardas en cortar el césped del jardín de delante de tu casa, en teñirte el pelo, en ver un tercio de  un partido de hockey sobre hielo. Diecinueve minutos es lo que tardas en hacer bollos en el horno, o el tiempo que tarda el dentista en empastarte una muela; o el que tardarías en doblar la ropa de una familia de cinco.
En diecinueve minutos se agotaron las entradas para ver a los Tennessee Titans en los play-off. Es lo que dura un episodio de un episodio de una comedia televisiva, descontando los anuncios. Es lo que se tarda en ir en coche desde la frontera del Estado de Vermont hasta la ciudad de Sterling, en New Hampshire.
En diecinueve minutos puedes pedir una pizza y que te la traigan. Te da tiempo a leerle un cuento a un niños, o a que te cambien el aceite del coche. Puedes recorrer un kilómetro y medio caminando. O coser un dobladillo.
En diecinueve minutos, puedes hacer que el mundo se detenga, o bajarte de él.
En diecinueve minutos, puedes llevar a cabo tu venganza.

Y por ultimo, como a mi me gusta poner algunas frases que me han gustado-dejado en sock:

- No puedes romper las normas, ni siquiera cuando todo el mundo parece saltárselas. Porque si tú lo haces, si todos lo hiciéramos, entonces el mundo se convertiría en un lugar donde no se podría vivir. Un lugar en el que se robarían los abrigos, y a los niños les pegaran en el patio. En lugar de hacer los que nos parece mejor, a veces tenemos que optar por lo más correcto.

- No se puede luchar contra la injusticia del destino. Lo único que se puede hacer es sufrirlas y esperar un mañana diferente.

- El hecho de creer o no creer en el Destino se reduce a una cosa: a quién echarle la culpa cuando algo va mal. ¿Crees que tú eres responsable, que si lo hubieras hecho mejor o te hubieras esforzado más no habría sucedido? ¿O lo achacas simplemente a las circunstancias? Conozco a personas que al enterarse de la muerte de alguien dirían que ha sido la voluntad de Dios. Conozco a otras personas que dirían que ha sido la mala suerte. Y luego está la opción que yo prefiero: que estaban en el lugar equivocado, en el momento inoportuno.Pero claro, también podrían decir eso mismo de mí ¿verdad?

- Si le das el corazón a alguien y luego se muere, ¿se lo lleva consigo? ¿ Te pasas el resto de la vida con un agujero en el interior que no puede llenarse?

- Sabía que no era lo mismo algo que te hiciera feliz o algo que no te hiciera desgraciado. El truco estaba en convencerse de que eran  una sola cosa.

- Cuando no encajas, te vuelves sobrehumano. Puedes sentir los ojos de los demás clavados en ti, como el Velcro. Eres capaz de oír una murmuración sobre ti a kilómetros de distancia. Eres capaz de desaparecer, aun cuando parezca que sigues ahí. Eres capaz de gritar, sin que nadie oiga nada. Eres el mutante caído en el barril de ácido, el bufón que ya no puede quitarse la máscara, el hombre biónico que ha perdido todos sus miembros y nada de su corazón. Eres esa criatura que una vez fue normal, pero que de eso hace tanto tiempo, que ya no recuerdas cómo era.

- Uno nota cuando la gente lo mira. Es como el calor que despide el asfalto en verano, como la punta de un atizador en la espalda. No se necesita oír ni un solo cuchicheo para saber que se trata de ti.Antes solía mirarme en el espejo del baño para ver qué era lo que ellos tanto miraban. Quería saber qué era lo que les hacía volver la cabeza; qué había en mi que fuera tan increíblemente diferente. Al principio no lo entendía. Quiero decir que era yo, y ya está. Hasta que un día al verme reflejado entendí. Miré mis ojos y sentí aversión hacia mi mismo, quizá tanta como la que ellos sentían. Aquel día empecé a creer que ellos tenían razón.

- Nada. Hace mucho que dejé de esperar nada.

- Si te duele, lloras. Si te enfurece, golpeas. Si albergas esperanza, te preparas para una desilusión.

- Imagino que como los explosivos. Una vez enciendes la mecha, o bien destruyes la bomba... o la bomba lo destruye todo.

-Bienvenida al club en el que nadie quiere ingresar. Eres miembro de por vida.

- Cuando alguien muere, su vida no es la única que se detiene en ese momento.

- Cuando emprendes un viaje de venganza, comienza por cavar dos tumbas: una para tu enemigo y una para ti.
- No necesitas agua para sentir que estás ahogándote.

- Las cosas aún existen mientras haya alguien que las recuerda.

- Cuando era pequeño, solía poner sal a las babosas. Me gustaba observar cómo se disolvían delante de mis ojos. La crueldad es divertida hasta que te das cuenta de que alguien sale herido. Ser un perdedor podría ser algo llevadero, si sólo significara que nadie te prestaba atención, pero en la escuela significaba que eras buscado activamente. Tú eres la babosa y ellos tienen la sal. Y no han desarrollado una conciencia. Hay una palabra que aprendimos en ciencias sociales: schadenfreude. Es cuando disfrutas viendo el sufrimiento de otro. La pregunta es, ¿por qué? Creo que forma parte del instinto de autoconservación: si quieres subir más arriba de la escalera, debes pisar a alguien más. Y en parte esos se debe a que un grupo se siente mucho más grupo cuando se une contra un enemigo. No importa si ese enemigo nunca ha hecho nada para lastimarte, sólo tienes que hacer como si odiaras a alguien más de lo que te odias a ti mismo.

- No tengo intereses, no tengo personalidad, no tengo historia, excepto la que tú me has dado.

- Una vez que el mundo desaparecía de debajo de los pies, ¿se volvía alguna vez a pisar tierra firme?


Bueno en realidad hay bastantes más pero creo que ya he puesto suficientes :P

1 comentario:

  1. A mi tambie me gusto mucho
    El final, simplemente cuadrado
    Ame y odie a Peter y a Josie
    Odie a matt
    Se me hundio el corazon con lacy y me encanto el final de Alex
    Uhhi super recomendable libro
    En mi top 10

    ResponderEliminar

¡Gracias por comentar! :)